Leon Trotsky

EL ACERO Y EL ORO SOBRE EL PROBLEMA DE LOS ACTOS DE TRAICIÓN EN EL EJERCITO ROJO

 


Escrito: 17 de junio de 1919
Fuente de esta edicion: MIA.org
Traduccion: Rodrigo Cisterna, con cuyo permiso aparece aquí.
Html: Rodrigo Cisterna, 2015


 

Nuestro torpedero Karl Liebknecht ha capturado en el Mar Caspian un barco a vapor sobre el cual el bien conocido asesino Ciento Negrista el General Grishin - Almazov [A. N. Grishin Almazov sirvió a Kolchak en Siberia, en aquel tiempo transformo en el Frente Sur, donde el actúa como gobernador de Odessa en interés de Denikin] fue tomada una carta de Denikin a Kolchak. Grishin - Almazov se disparo. Su barco a vapor y su tripulación fueron tomados en custodia. Los documentos capturados serán publicados dentro de unos pocos días. En su carta a Kolchak Denikin escribía, entre otras cosas, que allí no esperaban ayuda de parte de los Aliados en forma de tropas, después los Aliados se están ahora sobre la víspera de casi tales "hechos milagrosos" como habíamos experimentado - esto es, ellos están en las aguas de la revolución proletaria. Aun Denikin había sido obligado a comprender y admitir esto. Las burguesías de Francia, Inglaterra, y la italiana no poseen hace tiempo cualquier fuerza armada. Los ladrones de la Entente frustran vergonzosamente fuera de Odessa y Sebastopol. Después de esto, lanzaron una campaña en contra de Petrogrado, y prometieron en todos sus periódicos y radios que la capital proletaria norteña caería dentro de unos pocos días. Sin colocarse en Petrogrado. El Frente de Petrogrado es incomparablemente sano que hace unos meses atrás, y las bandas anglo francesas habían sido compelidas para revelar su impotencia militar ante todo el mundo.

Pero esto no significa que el imperialismo se rinda. No, ellos se están poniendo a trabajar con todos los recursos que poseen, con el fin de salvarse y aplastarnos. Se excitan el apetito imperialista de las burguesías polacos, rumanos, Letones, estonios, Finlandesas, con el fin de ponerlos sobre la Federación Rusa. Al mismo tiempo no solamente los ayuda la burguesía Rusa y los Kulaks rurales para crear su propio ejército sino que están trayendo con todo su poder para introducir la corrupción y la traición dentro de las principales filas de los Regimientos soviéticos.

Los imperialistas Anglo Franceses están usando para este fin miembros individuales del personal comandante ruso.

Los oficiales del viejo ejército Zarista están estallando por la revolución en sus tres cacerolas. Por una parte, bajo la bandera de Kornilov, Kaledin, Krasnov, Denikin y Kolchak, sonroja en blindar abiertamente contra la Rusia obrera y campesina, y vende sucesivamente a Rusia a los alemanes y los franceses y británicos. En el polo opuesto a ellos estaban los grupos de oficiales, despertados en los primeros tiempos por los eventos de la revolución, quienes comprendieron la gran verdad del proletariado y tomaron honestamente y sinceramente sus lugares en su ejército. Miles de ex oficiales habían dado sus vidas heroicamente, sin nombre o fama, junto a las filas con los soldados obreros y campesinos. Finalmente, este era un tercer, un vasto grupo en el medio, hombres asustados y angustiados, quienes trajeron su aptitud y probaron en los grandes eventos. Cuando las fuerzas Soviéticas es victoriosa, cuando la flama de la revolución estalla más allá en otros países estos grupos medios de oficiales comenzaron a inclinarse al poder soviético, entre los sentimientos o la perspicacia, y se señala por el todo en todas direcciones desde los defensores del Denikin y Kolchak. Cuando la ola - de la revolución momentáneamente se calma, cuando la combinación de asalto de nuestros enemigos, el Ejército Rojo momentáneamente se retrata, el invertebrado, la idealidad y la sección cobardemente de las perspectivas de los oficiales con el temor en la dirección de la cachiporra de Denikin, y produce desde su centro una nueva porción de desertores y traidores. Para esto sería además añadido el trabajo realizado por el oro de los Anglo franceses y americanos japonés. "Compro todo", dice el oro: "Tomo todo", dice el acero. Pero el acero de los Aliados se suspende impotentemente en el aire, por las manos de los trabajadores, se arma con el acero, no permitiría nunca más golpeada para ser chocados en las masas proletarias de Rusia. Pero los depredadores Anglo francés han acumulado un lote de oro robado. Ahora están preparando tomar enseguida una considerable cantidad de su botín si solamente pueden con eso capturar al Petrogrado que odian, y luego al Moscú rojo, y estrangular a la Rusia obrera y campesina. La burguesía de los países de la entente posee agentes naturales en la figura de las filas de propietarios rusos, generales y oficiales contrarrevolucionarios. Tienen su propia organización, su propio sistema de comunicación. Bajo los golpes del destino, los elementos contrarrevolucionario en Rusia habian en los años pasados elaborado un progreso considerable en la conspiración, el trabajo clandestino. Ellos a menudo se infiltran en nuestros regimientos en la apariencia de hombres del Ejército Rojo, y llevan la agitación corrompiendo allí, confiando en los elementos del kulaks.

Pero el principal esfuerzo de los agentes Kolchakistas y Dinikinistas en frente del imperialismo están dirigidos delante de los comandantes del Ejército Rojo. La demora parcial y efímera sobre el frente occidente y el sur ha sido creada favorablemente ensuciado por el trabajo de los traidores. Más allá de la perspectiva política, los así llamados oficiales "apartidistas", incapaces para tomar sus armas en medio de los grandes eventos, próximamente perderá su nervios y, cuando vea que estamos sufriendo derrota sobre esto o cual sector del frente, y oye de derrota sobre otros sectores, el fácilmente sacan la conclusión de que todo está perdido. O esto podría ser más correcto para decir que esta conclusión es sugerida para el para contratar provocación. Les murmuran en el oído: "si tu quieres resguardarte, cruza al otro lado al lugar de Denikin y Kolchak. Esto es de gran fortaleza allí, con la ayuda desde los países de la Entente: esto es alimento y oro." Sobre el frente occidental, donde estaban los imperialistas Anglo franceses están operando más celosamente que en cualquier otra parte más, a través del puerto Báltico, allí han sido unos pocos casos recientemente de traición por parte de los comandantes. Los comandantes de regimiento o de batallones dirigidos sobre sus unidades a sus enemigos, tomando ventajas de soldados faltos de consciencia o de su situación militar difícil. Por otro lado, estos pagan los agentes quienes aún quedan entre nuestros explotadores tales casos de traición con el fin de inspirar a los hombres del Ejército Rojo con desconfianza y hostilidad hacia el aparato de comando entero. A la derecha les dicen: "los oficiales, van sobre Denikin, Kolchak, Mannerheim y Hailer." A la izquierda les murmuran: "Hombres del Ejército Rojo, ¿es esto valioso para ustedes mientras derraman su sangre cuando ustedes están siendo traicionados por sus comandantes?"[El General Polaco Hailer comando una fuerza polaca combatiendo contra de los alemanes en Francia durante la Guerra Mundial el cual retorno a Polonia después del armisticio y combate contra los Bolcheviques.] Todos los ejércitos imperialistas están ahora dispersos y descompuestas. El Ejército Rojo solo está teniendo todos y creciendo, a pesar de revés parcial. Vemos esto no solamente desde los ejemplos de Rusia pero también desde la experiencia de Hungría, donde, después de una serie de derrotas, el ejercito proletario ha tirado a tras a sus enemigos y esta apretándoles una mas severo. Pero los imperialistas, contrario a rendirse, están esforzándose con todas sus fuerzas para infectar con el veneno de su putrefacción al joven organismo del Ejército Rojo. ¡Vano esfuerzo!

Por supuesto la traición de comandantes particularmente hace substancial daño al ejército. Pero estos casos no pueden seriamente sacudir su poder. El aparato militar creado por el proletariado es flexible y bastante duro para cubrir con la última convulsión de la bestia moribunda. Traicioneramente seria aplastado por las fuerzas unidas de los soldados, a si mismo comandantes y comisarios. Aquellos quienes están ansiosos ante todo en esta materia son la mayoría abrumadora de los honorables comandantes.

Esta mayoría, quienes desde entonces tenían tantos servicios para el país Soviético para su crédito, no podía permitir el pícaro aislado para manejar su astilla venenosa en el cuerpo de nuestro ejército y extender el pánico sospechoso del aparato comandante como un todo. Hombro con hombro con los comisarios, nuestros comisarios echaran desde su medio el miserable mercenario y los traidores.

La afluencia extensiva de los comunistas dentro del ejército debería inmediatamente levantar el nivel de su consciencia. Y en el último recurso este es sobre la consciencia de los obreros y el campesinado avanzado que todas las intrigas de nuestros enemigos han sido y continuara hasta ser desechado.

Los agentes del imperialismo están intentando desintegrar nuestro ejército. ¡"Encierra a las masas del Ejército Rojo"! seria nuestra respuesta. Deberíamos enviar, no solamente desde el centro pero también desde los departamentos y administraciones en los frentes, ejército y divisiones, los mejores obreros que tenemos, templados proletarios comunistas, en los niveles más bajo del ejército, los regimientos, batallones y campañas, aquellas células básicas del ejército revolucionario.

¡El máximo esfuerzo, empujar al abismo, apretar más fuerte, este es nuestro programa de acción!

Un comandante con una actitud entusiastica para su trabajo será dedicado al ejercito, y no podrá ser comprado.

Un comandante quien es indiferente y negligente es tanto un traidor como un candidato para la traición. El debe ser echado a fuera despiadadamente.

El comisario es el líder político e inspira a su regimiento. Los soldados y comandantes son su responsabilidad.

El vigila los intereses de la revolución obrera. Y si un comisario no esta a la altura de las circunstancias, el debe ser al instante removido. Las células comunistas deben ser verificadas y purgadas de nuevo y otra vez en la claridad de la experiencia en la lucha.

Este ha sido nuestro camino hasta ahora. Este quedara en el futuro como adecuado. Podremos simplemente redoblar nuestros esfuerzos ahora esa derrota temporariamente en dos frentes están causados recientemente brota de traiciones.

Si los bandidos imperialistas de acero no nos habían destruido, ni podremos ser destruidos por los traidores del oro Anglo francés. [ La metáfora de Trotsky es tomada del poema de Pushkin: "Todo es mina", dice el oro; "Todo es mina", dice el acero. "compro todo", dice el oro; "Tomo todo", dice el acero.]●

El 17 de junio de 1919. Vorónezh - Kursk. "En Ruta", N° 54.