Escrito: 1 de septiembre de 1919.
Fuente de esta edicion: MIA.org
Traduccion: Rodrigo C, con cuyo permiso aparece
aquí.
Html: Rodrigo Cisterna, 2015
La desgracia principal del Ejército Rojo es su escasez de caballería. Nuestra guerra es una guerra de maniobra y pide la máxima movilidad. Esto asigna un papel importante a la caballería. Sentimos nuestra debilidad en este sentido anteriormente: Kaledin, Krasnov y Dutov gozaron siempre de superioridad en caballería. Ahora, la incursión destructiva de Mamontov ha planteado agudamente la cuestión de la creación de grandes unidades de la Caballería Roja.
Nuestra falta de caballería no es accidental. La tierra de la antigua caballería rusa fue la estepa, y las comunidades cosacas se establecieron allí. La revolución del proletariado vino a nacer en los grandes centros industriales. No tenemos ninguna escasez de ametralladoras y artilleros, sino que estamos viviendo una gran falta de jinetes. Las estepas, lejos de los centros, fueron los focos de la contrarrevolución. Desde el Don y los Urales llegaron los Kaledinistas, Krasnovistas y Dutovistas. Denikin encontró su soporte más importante en el Don y el Kuban. En cuanto a las unidades de caballería no cosaca, se trataba, desde tiempos inmemoriales, el apéndice de los funcionarios privilegiados y titulados. Un espíritu ultra-reaccionario siempre prevaleció en la caballería. Los regimientos de la antigua caballería fueron los últimos en llegar a la orilla de la Revolución de Octubre. Y hoy nos damos cuenta de que los actos de traición son cometidos con mayor frecuencia por antiguos oficiales regulares de la caballería.
Desde el punto de vista puramente militar, la caballería se considera básicamente el arma de la vanguardia. Su estructura y método de lucha han cambiado poco a lo largo de los siglos: la embestida cosaca sigue siendo lo que fue en los siglos XVI y XVII.
En la última guerra imperialista, a pesar de la caballería pudo haber prestado servicios importantes en casos particulares, en general, su papel sigue siendo uno de tercera clase de importancia. Ahora, en las condiciones de nuestra guerra civil, vemos la caballería cada vez más importante. Se ha convertido en una poderosa arma de la guerra de movimientos, por lo que los avances y profundos movimientos de cambio y de profunda herida en la retaguardia del enemigo.
Este renacimiento de la caballería en nuestra guerra civil no es accidental. La incursión de Mamontov no hubiera sido posible si no hubiera encontrado en nuestros puntos de apoyo de la retaguardia, los cómplices, simpatizantes, agentes, informantes y etcétera. Por otra parte, no puede haber ninguna duda de que nuestra caballería se encontraría detrás del frente de Denikin incomparablemente más amigable que la caballería de Mamontov ha encontrado a espaldas de nuestros ejércitos del Sur.
Además de dirigir la simpatía y la ayuda recibida, el ataque profundo se ve facilitada por el hecho de que está teniendo lugar en el país de las incursiones propias, donde el pueblo y sus formas son familiares para ellos y donde se habla el mismo idioma. En resumen, estas son las condiciones que no son a lo internacional, sino de la guerra civil. El ejército más conservador y moribundo en gran medida de repente, como si dijéramos, revivió y se convirtió en un medio más importante de defensa y ataque en manos de las clases más conservadoras y moribundas. Debemos arrebatar esta arma y hacerla nuestra. La revolución obrera debe crear una poderosa caballería roja.
¿Es posible hacerlo? Hay que hacerlo, así como se puede hacer.
La creación del Ejército Rojo en su conjunto era una tarea incomparablemente más difícil, sin embargo, la clase obrera lo ha logrado. Muchas pocas razones tenia, entonces, para ser bloqueado por las dificultades en el camino de la creación de su propia caballería.
La parte más fácil de la tarea es el suministro de armas y de equipo para los jinetes y de los caballos. Zlatoust nos proporcionará el número de sables que necesitamos. Somos perfectamente capaces de hacerno un número suficiente de sillas de montar. lo que se requiere es que estos sea rápidamente producido, en los lugares donde existen las condiciones apropiadas, sin esperar a una iniciativa del centro.
El problema es más difícil, donde los caballos se refieren. Pero este problema también puede resolverse con bastante éxito. En Oriente nuestros ejércitos están entrando en las estepas, donde los caballos son abundantes. Cada avance que hacemos en el frente sur de nuevo nos presenta muchas oportunidades para obtener caballos. Por último, las fuentes en la propia Gran Rusia están lejos de haberse agotado.
Todo lo que se necesita es que la creación de una fuerza de caballería que debe convertirse en una tarea de las masas trabajadoras. Es necesario que el proletariado comprenda la importancia de la causa de la revolución de este nuevo paso adelante. El comunista debe convertirse en un soldado de caballería. Los comités ejecutivos de las provincias, los distritos y los Uyezd, los subdistritos deben competir entre sí para formar unidades de caballería, por pequeña que ésta sea, de sus fuerzas y recursos locales. Estas unidades más tarde se pueden combinar para crear grandes formaciones. ●
La República Soviética necesita de la caballería. ¡Caballería roja, adelante! ¡Al caballo, proletarios!
El 1 de septiembre de 1919
Tula-Ryazhsk
[Ryazhsk está al este de Tula, en el cruce de Tula-Penza y de las líneas ferreas de Moscú, Vorónezh]
"En el camino", No.93