Escrito: 6 de abril de
1919
Fuente digital de esta edicion: en el Mia.org
Traduccion: Rodrigo Cisterna, nov. de 2014.
HTML: Rodrigo Cisterna,
2014.
Camaradas, nuestra situación internacional y nacional ha alcanzado de nuevo un momento crítico. Ha sido realmente un buen número de momentos críticos, las dificultades, los peligros y las sorpresas en el desarrollo de nuestra revolución. Esta revolución no se desarrolla a lo largo de una línea recta ascendente, ni en una curva uniforme, sino en zigzag, en una línea ondulada, aunque una que se eleva más y más alto. En general, esta es la única manera de que una revolución puede desarrollarse, al ser un enfrentamiento entre fuerzas antagónicas. En la lucha entre estas fuerzas, si son fuertes, inevitablemente habrá de encauzarse hacia este lado o aquel, subidas y bajadas, avances y retrocesos. Pero sólo una de estas fuerzas es progresiva, dirigiendo a la humanidad hacia delante, y que es la fuerza de la clase obrera, como debe ser revelado cada vez con mayor claridad y certeza a través de todos los retiros y avances generales, los movimientos ascendentes y el progreso general. Vemos esto en el desarrollo de nuestra revolución obrera y campesina y de la revolución internacional.
Camaradas, comenzó en octubre con una subida tormentoso, y se llevó el dominio de los terratenientes y la burguesía, casi sin resistencia, pero ya en esa época estaba claro para los representantes más experimentados de la clase obrera que la victoria de Octubre no fue la final victorioso, que la burguesía y las clases poseedoras en general no renunciará a sus cargos hereditarios, privilegios y beneficios sin una pelea, que iban a ponerlo todo en marcha, el cielo y el infierno, sus conexiones internacionales, su habilidad para mentir y perseguir, la fuerza armada (en la medida en que lo posean), el poder de seducir y sobornar, en una palabra, todos los medios que las clases poseedoras han evolucionado en el transcurso de los siglos y los milenios de su gobierno. Y esa expectativa fue confirmada.
Desde entonces en enero y febrero, nuestra posición se tornó crítica. Nos encontramos entre la espada del imperialismo alemán y el yunque del imperialismo anglo-francés y americano. En ese momento el martillo parecía la amenaza más grande, y tuvimos que entrar en un acuerdo forzado con el imperialismo austro-alemán mediante la firma de la paz de Brest-Litovsk, un tratado de una dureza sin precedentes en la historia hasta entonces: luego de la paz de Brest -Litovsk fue superado por las condiciones que Gran Bretaña y Francia, las grandes democracias y libertadores de las naciones, impuestas a la Alemania agotada y debilitada. Muchos de ustedes, camaradas, probablemente recordará la situación objetiva de nuestro país y de los sentimientos que entonces prevalecían entre la clase obrera en esos meses malditos después de la firma de la paz de Brest-Litovsk y antes de nuestras victorias comenzó en el frente oriental.
Desde el Oeste nos vimos atrapados en las garras de hierro del imperialismo alemán. Las garras de hierro fueron apoyados desde el interior por la burguesía rusa y todos sus siervos, y, al mismo tiempo, estos sirvientes y lacayos aprovecharon el hecho de la empuñadura alemán de nosotros para decir: "Ya está, ya ves, tiene el poder soviético entregó a Rusia al imperialismo alemán" Y en ese mismo tiempo, en la llamada e invitación de la burguesía rusa y los partidos que lo sirven, una nueva amenaza surgió en el noreste: los checoslovacos. La zona del Volga estaba en peligro inmediato, y después de la toma del Arcángel, toda la costa norte también.
Camaradas, dudo que alguna gente noble alguna vez se encontró en una situación tan terrible como estábamos en el mes de marzo, abril, mayo, junio, julio y agosto del año pasado. Parecía que nuestras últimas cuentas con la historia habían sido cerradas y firmadas por el imperialismo alemán por un lado y por el imperialismo anglo- francés y nipoamericano por el otro. A nuestros enemigos triunfantes parecía que la Rusia revolucionaria era un cadáver político que se convertiría en abono para los campos del otro cultivo, otra civilización, que no habría futuro independiente para el pueblo revolucionario de Rusia. La burguesía y los partidos que lo apoyaron - y nunca debemos olvidar esto, y siempre hay que recordarles de ello - simplemente invito a los extranjeros Varegos [El Varegos eran vikingos suecos. Según la leyenda, la dinastía que gobernó en Rusia desde el siglo IX hasta el XVII, los Rurikovich, eran descendientes de un Varegos llamado Rurik a quien los hombres de Nóvgorod invito a ser su príncipe: "Nuestra tierra es grande y fértil, pero no hay que permitirlo: que venga y reine y gobierne sobre nosotros'] que venga y nos gobierne. Lo aplican en diferentes direcciones - a Alemania, a Gran Bretaña, a Japón, a los Estados Unidos - en función del destinatario pasó a ser la más cercana. La burguesía ucraniana y los burgueses rusos indignados que han acudido a Ucrania hicieron un llamamiento a los alemanes y austriacos. La burguesía y los kulaks en nuestro Norte buscaron la protección de Gran Bretaña, y en el Oriente que confraternizaron con los checoslovacos quienes, como sabemos, no eran más que el desprendimiento de la lucha de la bolsa de valores francesas.
Y aunque la burguesía rusa se separó en este momento crítico, crucial en varias secciones - es decir, lo vendió al pueblo ruso a diferentes estados - mantiene su cohesión interior. En ese momento se demostró a las masas trabajadoras del pueblo ruso que el patriotismo y los intereses de la patria no son más que una máscara ocultando las ventajas de los beneficios y privilegios, y que cada Kolchak, Miliukov, Denikin y Skoropadsky está dispuesto a vender y a revender a -Rusia tres veces más (¿por qué digo tres veces? diez veces, cien veces) sólo manteniendo una décima parte de sus antiguos privilegios y beneficios.
Esa fue una gran escuela para las masas trabajadoras de Rusia, una gran escuela. Y una segunda tal escuela fue nuestra experiencia con Kolchak aquí en el Este. En la medida en que la Revolución de Octubre fue inesperada y no estaba preparado ideológicamente entre el campesinado de Rusia, sobre todo en la zona oriental, donde los campesinos estaban en mejores condiciones, menos hambre, y por lo tanto menos susceptible a la propaganda comunista - en la medida en que la revolución de octubre no estaba preparado ideológicamente entre los campesinos de la zona oriental, para extender ese, lema y la idea de la así llamada Asamblea Constituyente reunida con alguna respuesta de ellos durante mucho tiempo. En las masas, el campesinado no puede hacer nada: esa es su desgracia. Esta se dispersa, no vive como los trabajadores, que se concentran en las fábricas y las ciudades, y por lo tanto están más cerca de las universidades, las escuelas, la educación, los periódicos y el teatro. Sin embargo privó a los trabajadores poder haber estado bajo el orden capitalista, fueron llevados sin embargo en contacto más estrecho con las fuentes de la cultura, la civilización y la ilustración. Los campesinos fueron esparcidos en medio un millón en los pueblos y aldeas, repartidos a lo largo de la enorme extensión de la vieja Rusia zarista. En cada pueblo había cientos, o a lo sumo, miles de habitantes, que estaban sin vínculos entre sí y estaban ideológicamente indefensos. Esta masa campesina tiene dificultades para expresar sus anhelos, sus demandas, se tambalea de un lado a otro y no puede encontrar un programa claro de sí mismo. Esto no es culpa de los campesinos, es una desgracia debido a su destino doloroso en el pasado. Los campesinos fueron engañados por la monarquía, por los sacerdotes de todas las religiones, los burócratas de todos los países: ellos fueron engañados por la burguesía con el liberalismo y las ideas de la democracia. Y los campesinos se vieron afectados de vez en cuando por las crisis desde el interior, produciendo terribles estallidos revolucionarios, en los que quemaron la propiedad del señor de la tierra, pero luego se cansó y se sometio de nuevo con resignación al dominio de las clases poseedoras. La historia de la humanidad sabe estos brotes temerosos de la ira de los campesinos y, al mismo tiempo, de impotencia campesina. Las clases poseedoras, siendo mejor educadas, siempre tuvo éxito al final de refrenar a los campesinos quienes se habían animado a levantarse en su contra.
Existía el peligro de que eso sucediera en nuestra revolución también. Si no fue así, esto fue sólo porque, por primera vez en la historia del mundo, el campesinado, que se había levantado en rebelión fue dirigida no por las clases poseedoras de los pueblos, sino por la clase de los proletarios desposeídos. La clase obrera tomó su lugar a la cabeza de los campesinos con el fin de que se salga de su pobreza, y transformo su lenguaje de la ira y el sufrimiento en el lenguaje de las ideas revolucionarias, los eslóganes revolucionarios - sin engañar a los campesinos, sino para despertar por primera vez en la historia y emanciparlo del hambre y de los antiguos engaños. Pero, camaradas, este giro histórico, este giro ideológico era demasiado catastrófico para la masa de los campesinos, y no es sorprendente que, después de escapar de la barbarie zarista y de la opresión de la nobleza, de la prisión de los sacerdotes, después de aparecer de repente bajo el camino de la revolución socialista proletaria, que siempre se mostró incapaz de distinguir amigos de enemigos. Y lo que es un proceso doloroso, costoso es en sí, compañeros, especialmente cuando ocurre en un país agotado, un país que ha experimentado un período de cuatro años de guerra y ahora estaba sufriendo el embate del imperialismo mundial. La revolución son los dolores de parto de un nuevo orden social. Para llegar hasta el nacimiento del bebé causa dolor grave para el organismo de la madre: pero aquí un nuevo orden nace de lo viejo, y, naturalmente, todo el organismo del país es sacudido por dolores de parto terribles, que son sentidas por el campesinado y el proletariado en todo el país. Pero la clase obrera se da cuenta de que este es un período de transición, que este período de transición será seguido por el desarrollo absolutamente normal de una nueva sociedad, lo que compensará todas las dificultades, las cargas y los sufrimientos de este período de transición. Es incomparablemente más difícil para el campesino entender este hecho: él se siente con más fuerza las penurias y calamidades de la época de transición, cuando las heridas nuevas se superponen a las viejas heridas, llagas antiguas, lo que les duele aún más, del mismo modo, cuando les quitan los grilletes que han consumido en las manos de un preso y los pies, el siente más dolor que cuando estaba tranquilamente acostado, encadenado a la pared. En ese momento, las viejas heridas de los campesinos y las llagas parecen especialmente insoportables, y en ese momento los eseristas de Derecha y mencheviques se le acercaron, diciendo que había una forma especial de resolver dolorosamente todos los problemas a través de una Asamblea Constituyente, a través de sufragio universal pacífico. Ellos se juntaron en un solo edificio, llamado parlamento, allí habría un presidente, llamado Chernov, allí habría partidos, allí habría votación, habrá urnas de papeletas en las que se ha abandonado, y de acuerdo con la forma en que la votación funcione, por lo que las cuestiones que se establecieron: la tierra o bien se dará o no se dara a los campesinos, y el trabajador sería dueño en el país o lo sería el capitalista. Todo se hace por votación, en la forma correcta, sin ningún derramamiento de sangre.
El trabajador sabe que las cuestiones radicales, no se resolverán por la votación, por levantar y el bajar de las manos y otras calistenias parlamentarias, así las clases poseedoras no renunciará a sus posiciones sin combatir, cuando estas posiciones pueden ser tomadas solamente por la fuerza, pecho contra pecho, acero contra acero, sangre contra sangre. El trabajador sabe esto, pero el campesino está confundido.
Pero aquí, en Samara, en toda la zona del Volga, la historia llevó a cabo un experimento gigantesco en el esclarecimiento de la conciencia de las masas más atrasadas. Aquí, el Gobierno de la Asamblea Constituyente estableció su asiento - es decir, Kolchak, los Dutovistas, y ese grupo intermedio de intelectuales que deambulan entre los terratenientes y los campesinos, los campesinos y los obreros. Y es este intermedio, los buenos para nada, el grupo mediocre de eseristas y mencheviques, que es el portador de la idea de la Asamblea Constituyente.
Kolchak sabe asi que cuenta este poder material. Denikin sabe que, también, y nosotros también. Ellos, sin embargo, imaginan que lo que cuenta es la magia de Chernov, Avksentiyev y los otros hombres grandes de la democracia parlamentaria. La historia ahora realiza su experimento. Nos dejara, su Asamblea Constituyente apartada de la clase obrera y el campesinado pobre, para unirse al tren de equipajes de los ejércitos de Kolchak y de Dutov, como un grupo no combatiente el cual servirá allí como intermediarios entre las Centurias Negras y los Guardias Blancas - negro y blanco son lo mismo allí - por un lado, y las masas trabajadoras, por el otro. Con la consigna de la Asamblea Constituyente, las ideas de democracia, ayudaron a Kolchak a levantar un ejército. Kolchak es un aventurero, un ex almirante zarista, quien trató de obtener ayuda de los alemanes, se acercó al servicio de los americanos, visitó Nueva York, obtuvo sus piezas de plata y volvió aquí. Él es un aventurero puro y simple, sin un pasado y (¡no vamos a tener duda sobre esto!) sin futuro. Este aventurero nunca habría tenido ningún éxito a menos que se hubiera reunido en torno a sí mismo el escaparatismo de la Asamblea Constituyente. Y cuando este escaparatismo le había ayudado a formar un ejército, les dijo a Chernov y Avksentiyev: "El esclavo ha hecho su trabajo, ahora estén fuera. "[La Frase de Trotsky es una variación de una frase muy conocida en la obra de Schiller Fiesco: "El moro ha hecho su trabajo: el moro se puede ir."] Eso fue realmente lo que pasó.
Los esclavos de la "asamblea constituyente" quienes habían hecho su trabajo corriendo en distintas direcciones.
Avksentiyev fue a Francia y Gran Bretaña solicitando la ayuda del imperialismo europeo contra nosotros. Chernov, con sus compices intelectules, con todo el presídium de la santísima Asamblea Constituyente llamó a la puerta de nuestra casa soviética y pidió que lo dejaran entrar, porque no podía soportar permanecer por más tiempo en la atmósfera que la Asamblea Constituyente que había creado. [La política de la Asamblea Constituyente en Samara, y más tarde en Ekaterimburgo, condujo al golpe de Estado del 18 de noviembre, lo que puso en el poder a Kolchak. El movimiento de la Asamblea Constituyente adoptaron una serie de resoluciones de ancas, cuya discusión fue interrumpida por un pequeño destacamento del 25 ª Regimiento de Infantería de Montaña Yekaterimburgo. El 19 de noviembre el destacamento arrestó a todos los miembros de la Asamblea, encabezados por Chernov, y el 20 de Noviembre este congreso, situado en furgones de mercancías con calefacción, fue enviado primero a Chelíabinsk, el asiento del alto mando de Checoslovaquia, y desde la misma Ufa. Los Eseristas quienes habían sido ministros en el directorio (Avksentiyev, Zenzinov, Argunov y Rogovsky) fueron enviados bajo vigilancia especial a Harbin y de allí a Estados Unidos, después de lo cual se les permitió ir a donde quisieran. Así terminó la existencia de la Asamblea Constituyente en territorio ruso. Algunos de los miembros de la Asamblea Constituyente se acercó desde Ufa a unirse a nosotros en la Rusia soviética.]
Y esto fue una gran lección, camaradas, para las masas más atrasadas e ignorantes. Uno no puede desear ni pedir una mejor lección más gráfica, a pesar de que se pagó un alto precio. Vayan ahora y llamen a cualquier campesino ruso quien cuenta con algunos de sus ingenios sobre él y le pregunta: "¿Bueno, qué hay de la Asamblea Constituyente, se va a reunir con su bandera?""¿Cuál debe ser la respuesta dada por un campesino quien ha seguido los acontecimientos en nuestro país aunque sea un poco? Él sólo puede responder: "Yo vi esa bandera en Samara, vi en Yekaterimburgo y en Ufa, vi cómo Kolchak utilizo esa bandera como alfombra."
Y así los portadores más autorizados de esta bandera, los señores eseristas, buscaron refugio - ¿dónde? Por qué, cuando la revolución se había mantenido firme, porque la clase obrera no había dejado de seducir por las ideas formales y superficiales de la democracia, sino había dicho que la defensa de la revolución es el proletariado organizado y armado el cual detenta el poder, el cual monta su guardia armada en cada puerta y dice: "Prohibida la entrada aquí para los opresores y canallas."
Por lo tanto, camaradas, en cuanto a nuestro desarrollo interno, hemos tenido altibajos, avances y retrocesos, pero, en general, la historia ha funcionado espléndidamente para nosotros, destruyendo todas las viejas supersticiones. Y vimos el resultado de este trabajo, precisamente durante las revueltas campesinas recientes que fueron agitados por los agentes directos de Kolchak y el apoyo de los kulaks, sino que en algunos lugares trajeron en sus vorágine grupos considerabled de los campesinos medios - debido a que los campesinos sienten que la vida es dura, pero no siempre puede discernir el camino correcto de sus dificultades.
Durante estas revueltas, ¿cuál fue el lema propuesto por los que tomaron parte en ellos? Mientras que a principios de la primera, la revolución de Febrero, ellos levantaban el lema "!Por el zar!", lema que posteriormente fue abandonado. Se dieron cuenta de que no era posible llegar a algún grupo grande con ese lema, y tomado de los eseristas la consigna de la Asamblea Constituyente. En ese momento Krasnov, Denikin, todos los cuales sólo soñaban con restaurar el poder de la autocracia de los terratenientes, estaban por la Asamblea Constituyente. Cuando se presentó ante el pueblo se pusieron la máscara de la Asamblea Constituyente. Kolchak ha agotado esa mascarada particular. Ni rastro de ella quedo. Y así, durante las recientes revueltas, aquí en la retaguardia del frente del Este, la consigna planteada por los agitadores contrarrevolucionarios no era: "¡Viva la Asamblea Constituyente!", Era "¡Viva el poder soviético!", Pero acompañado por el de "¡Abajo el partido comunista!", "¡Abajo los extranjeros!", etcétera. No se atrevían a levantar la consigna: "¡Abajo el poder soviético!" Y - tengo un buen número de llamamientos, impresos y manuscritos, que fueron distribuidas por los Guardias Blancos en las provincias de Simbirsk y Kazán - en todas partes falsificaron nuestras consignas y nuestras organizaciones. Ellos configuraron su cuartel con un comisario militar y un líder militar, todo correcto, tal y como estableció en los decretos del poder soviético. La idea del poder soviético debe haber penetrado profundamente en la conciencia, los nervios y la piel de las masas campesinas, si la única manera de engañar a los campesinos y levantarlos en una revuelta que ha de venir hacia adelante bajo la bandera del poder soviético.
Debemos sacar la lección de las recientes revueltas. Informe sobre este asunto los otros días ante el Soviet de Moscú, y allí recorde como, hace cincuenta años, más o menos, cuando los revolucionarios rusos eran sólo un puñado insignificante y débil, y el campesinado estaba saturado en las supersticiones religiosas y monárquicas, el asunto Chigirin se produjo, con su figura dirigente como nuestro difunto camarada Stefanovich [Ya. V. Stefanovich murió en 1915.] Entonces un joven inexperto, que dio un paso muy arriesgado. Este grupo de revolucionarios, hizo un llamamiento a los campesinos mediante una carta falsificada a nombre del Zar - fue llamado la carta de "oro", y dio a luz un gran sello de oro. [En 1875 el camarada Stefanovich, junto con los camaradas Bokhanovsky y L. Deutsch (Deich), tomando ventaja de las perturbaciones agrarias en el uyezd Chigirin, provincia Kiev, decidió tratar de organizar una revuelta campesina con la ayuda de los manifiestos zaristas. Stefanovich preparó una carta falsa, supuestamente escrita por Alejandro II y se imprimió en una hoja grande de Bristol a bordo, con un sello de oro. Además de esta carta circular Stefanovich, también en nombre del zar, las reglas de una asociación campesina llamada 'La Banda Secreta'. Una organización clandestina se formó sobre esta base y se puso a trabajar. Para más detalles, véase propias notas Stefanovich, las cuales están incluidas en Historia de los movimientos revolucionarios en Rusia de Thun- Este libro, por Alphons Thun, un estudioso alemán, se publicó en 1883. Una traducción rusa apareció en Ginebra en 1903.-.] ¿Qué significa este procedimiento? Significó la extrema debilidad de los revolucionarios y el gran poder de las supersticiones monárquicas entre las masas campesinas.
Este intento fue condenado por todos los revolucionarios, ya que, no obstante los revolucionarios débiles pueden ser, nunca tienen el derecho de tratar de congraciarse con las masas por la imitación de sus ideas equivocadas. ¿De dónde yace la fuerza de un partido revolucionario? En el hecho de que iluminemos y eduquemos la conciencia de las masas trabajadoras. Un partido revolucionario no tiene el derecho, ya sea en tiempo de éxitos o en el tiempo de las derrotas, ya sea cuando es fuerte o cuando es débil, a mentir y engañar a las masas trabajadoras. Por eso el partido revolucionario, como he dicho, condenó esta aventura por un grupo de revolucionarios débiles.
Pero, camaradas, mientras que lo que teníamos hace 50 años fue un paso en falso tomado por un partido revolucionario joven y débil, hoy vemos ante nosotros la última jugada del aliento de la contrarrevolución. No se puede encontrar base ideológica bajo sus pies. Se ve obligado a ocupar su puesto en nuestra tierra.
Esta es porque los eseristas de izquierda, quienes se consideran como que ningun partido del movimiento de la Asamblea Constituyente sino un partido soviético, ahora están sirviendo como cobertura para la contrarrevolución. Al igual que en el período anterior, los eseristas de Derecha dio o alquilo, la bandera de la Asamblea Constituyente a Kolchak, por lo que ahora los eseristas de izquierda están prestando a los mismos agitadores Kolchakistas y a todos los contrarrevolucionarios en general una bandera que es una farsa, una falsificación, una bandera falsa del poder soviético.
En estas revueltas, entonces, nos dimos cuenta de nuestra propia fuerza ideológica y de la gran organización. Pero al mismo tiempo, por supuesto, estas revueltas fueron también un signo de nuestra debilidad. Para que sean arrastrados dentro de su torbellino, como he mencionado, no solamente los kulaks, sino también - no debemos engañarnos a nosotros mismos en este punto - una cierta sección de los campesinos medios. Esto se explica por las causas generales las cuales he descrito - por el atraso de los propios campesinos. Pero no hay que echarle toda la culpa de este retraso, Marx dijo una vez que el campesino no tenía solamente prejuicios, sino también buen sentido, y uno puede apelar a los prejuicios de los campesinos a su buen sentido, lo llevan sobre la base de la experiencia en el nuevo orden de las cosas, de modo que los campesinos realmente sientan que en la clase obrera, su Partido, el aparato soviético, tienen un líder y defensor: así ese campesino entiende la razón de nuestros pedidos, los acepta como algo inevitable que se aplican a los campesinos rebeldes, que actúa de modo de este modo una carga doble y triple se coloca en el kulak: que entramos en la vida interna del pueblo y llevamos a cabo investigaciones, para determinar quién es mejor y quién es peor, a fin de hacer una diferenciación interna, la estratificación, y tratan de formar vínculos más estrechos de amistad con los campesinos medios. Esto es lo que hay que hacer por dos razones.
En primer lugar, en nuestra lucha contra los enemigos, externos e internos, hasta que la clase obrera haya llegado al poder en Europa Occidental, hasta que podamos descansar nuestro flanco izquierdo en una dictadura proletaria en Alemania, Francia y otros países, el proletariado de Rusia necesita descansar su flanco derecho sobre el campesino medio en el interior de Rusia. Pero no sólo en este período: tampoco, incluso después de la victoria final, inevitable e históricamente determinada de la clase obrera en toda Europa, nos enfrentaremos en nuestro país la inmensa tarea importante y de socializar nuestra agricultura, transformándola de la fragmentado, atrasa, la forma campesina de economía en una nueva forma colectiva, cooperativa comunista. Cómo puede este el más grande Esto alude al comentario de Marx sobre el bonapartismo en El 18° Brunmaire de Luis Bonaparte: "No representa la ilustración, sino la superstición del campesino, no su juicio, sino su transición perjudica en la historia del mundo se realiza en contra de la voluntad de los campesinos? No se puede hacer. En esta esfera no es necesario una medida coercitiva, de coacción, sino medidas educativas, el ejercicio de influencia, apoyados por los buenos ejemplos, por los incentivos - estos son los métodos por los cuales el proletariado organizada e iluminada hablaremos con los campesinos, con los campesinos medios.
Y en el Don, camaradas, cuando nuestros regimientos entraron en contacto con los cosacos, los cosacos con los estratos más bajos, como liberadores del yugo de Krasnov, estos cosacos pidieron a nuestros comisarios comunistas: "Pero, ¿qué pasará después? ¿Vas a tirar todo ahora en acciones ordinarias? ¿Se va a tomar todo de nosotros y se la entrega a la comuna? Esos comisarios quienes tenían la mejor comprensión del sentido de la política comunista les respondió: "No, vamos a usar la fuerza sólo contra los capitalistas, los explotadores, los terratenientes y los kulaks rurales , los que explotan el trabajo de otros con fines de lucro y la especulación en los granos. Cuando el campesino medio se refiere, incluyendo el cosaco campesino medio, vamos a utilizar métodos de influencia ideológica, es decir, se fomentará la formación de granjas comunistas. El Estado contribuirá a estas granjas con información agronómica, ayuda científica, técnica y financiera, y las granjas individuales se les permitirán tratar de hacerlo mejor que estas granjas comunistas." Entonces los cosacos, los cosacos los que dudan, se saturó con los sentimientos de la Pequeña dueño de la propiedad, dijo, rascándose la cabeza: "Bueno, eso no es tan malo. Vamos a ver si su comuna funciona bien, y, si lo hace, entonces vamos a ir a esa manera de hacer las cosas".
Este es el único método correcto para el proletariado en el poder a emplear: a ver al campesino como un aliado y mantener su política en el campo por completo a esa línea. Las revueltas que tuvieron lugar aquí en la zona del Volga nos dio una advertencia y un aviso de que es doblemente terrible porque el proletariado aún no ha llegado al poder en Occidente. Los errores son siempre malos, pero cuando hemos visto fortalecida por la victoria del proletariado en Occidente los errores que realicemos será menos peligroso: hoy son peligrosos por cierto, y más aún porque no se trata sólo errores, sino, a menudo más que ningún, crímen actual. El poder soviético es un poder gobernante. El poder crea oportunidades para que las personas obtengan todo tipo de privilegios, para obtener ganancias ilegales y las riquezas, ejerciendo la violencia, y en varios lugares algunos elementos profundamente corruptos se han unido inevitablemente al poder soviético. Hay, por supuesto, muchos oficiales quienes vivían en un solo ambiente en el marco del viejo orden, y creen en él, sino que vio el nuevo orden y se pasó a nuestro lado como hombres honestos que había comprendido la verdad. Pero también hay muchos que bajo el antiguo régimen fueron doblemente teñidas de sinvergüenzas, que defendían el viejo punto de vista, ya que era a su favor hacerlo, y que están listos en cualquier régimen re-pintarles los mismos en cualquier color requerido, para orar a cualquier dios - al igual que en una de las antiguas obras se decía que el viejo cortesano Osterman rezó por primera vez al dios ruso, luego a la dios turca, entonces al dios alemán, y luego a los tres y - engañado todos ellos.
Así, pues, camaradas, tanto en la cumbre y en el fondo de los elementos del poder soviético se han fijado que, espiritualmente hablando, profundamente ajenos a la política comunista, espiritual y moralmente ajeno a las masas obreras - y, con tan sólo mirar por vosotros mismos, aquí y allá en los Uyezd y subdistritos se comportan respecto a los campesinos de la misma manera como en los viejos tiempos, los gendarmes y la conducta de los capitanes de la tierra. [En 1889, como parte de un movimiento general para deshacerse de algunas de las características democráticas de las reformas introducidas en la década de 1860, el Gobierno zarista nombro "capitanes de la tierra" de las zonas rurales: por lo general los ex oficiales de la aristocracia terrateniente, se trataba de una especie de oficiales principal terratenientes cuya tarea era la de ejercer un control general de todas las instituciones rurales.] En algunos lugares los campesinos, literalmente, en un frenesí, en protesta impotente, se apoderó de palos y horcas y en su impotencia ideológica rompió las líneas ferroviarias y puentes destruidos, siendo incitados a ello por agitadores contrarrevolucionarios. Así, en la provincia de Kazán se me mostraron los documentos relacionados con los Uyezd Sengileyevsk, donde los campesinos habían sido sometidos a un trato inadecuado increíble por algunos pequeños funcionarios soviéticos - no digo funcionarios, directivos soviéticos, quienes atienden las necesidades de los campesinos y de explicar las cosas, utilizando la violencia abierta contra el enemigo directo, por supuesto, pero actuando como amigos a los campesinos cuyo nivel de conciencia es bajo. Lo que teníamos aquí era los antiguos métodos zaristas, la antigua opresión y coerción. Y cuando tuve que leer estos documentos pregunté: "¿Qué has hecho con esos hombres? digo: "Si yo fuera un miembro de su tribunal debería haber reunido a los campesinos del Uyezd Sengileyevsk y convocó, por un lado, la base de agentes de Kolchak que los había incitado a destruir las líneas de ferrocarril, y, por otro, los sinvergüenzas así llamados soviéticos que, utilizando el nombre del poder soviético, había oprimido a los campesinos, y uno y el mismo pelotón de fusilamiento de los hombres del Ejército Rojo se han disparado los dos lotes juntos."
Camaradas, tomemos clara atención de esta advertencia. Vamos a examinar y revisar nuestras filas soviéticas, vamos a purgar de todos los elementos ajenos a los campesinos y hacer entender que sólo hay un camino a seguir para ellos, es decir, cruzar, junto con la clase obrera, a través de ese paso difícil a los pies de que estamos de pie. Porque mientras nuestra situación interna es difícil en los meses de hambre de la primavera, y se pondrá aún más difícil en el verano, y esta dificultad será explotada por todos nuestros enemigos, nuestra situación internacional es cada vez mejor y mejor, y se abre ante nosotros una vez perspectivas más brillantes y más alegres. Camaradas, comienzo describiendo la paz de Brest-Litovsk como la página más oscura y más grave en la historia del poder soviético. Es probable que todos recordamos cómo todos los llamados patriotas gritaron a nuestras expensas, al hablar de soborno y la traición. Eran semanas y meses espantosas, cuando el poder soviético puso de manifiesto su impotencia. No tuvimos ningún ejército - el antiguo ejército se había dispersado, ahogando nuestras comunicaciones y arruinando la economía, y no había ningún nuevo ejército - y tuvimos que pagar la cuenta de la guerra en la que el ejército zarista había sufrido una derrota terrible. Hemos tenido que hacer frente a las viejas notas promisorias del zar y de Miliukov. Todo lo que se vino sobre nosotros.
Y cuando dijimos en ese momento: "Espera, nuestro día llegará. La revolución estallará en Alemania, el Kaiser no va a durar para siempre", cómo se burlaron de nosotros, esos sabios quienes decían: "usted está alimentando al pueblo ruso en las fábulas. El caracol llega, llegará alguna vez," y "Antes de que salga el sol, el rocío comerá tus ojos." Ellos realmente dijeron eso. Peor aún, los mencheviques y los eseristas alemanes, los Scheidemann y Ebert escribió en sus documentos de sólo diez días antes de la revolución alemana comenzara: "Los bolcheviques están engañando deliberadamente al pueblo ruso con su discurso de una revolución en Alemania: No habrá revolución aquí", escribieron esas líneas diez días antes de la revolución en Alemania. Los mencheviques rusos les citaron y comentaron sobre ellos, en referencia a su opinión cuando escribió acerca de este asunto.
Camaradas, aquí también, como en la cuestión de la Asamblea Constituyente, la historia funcionó espléndidamente y anticipó todos los acuerdos y todas las previsiones, tanto de los charlatanes y del socialismo científico. En Brest-Litovsk fuimos aplastados: sentado frente a nosotros estaba el barón Kühlmann y el Conde Czernin, en representación de los Hohenzollern y los Habsburgo, y, camaradas, si tan sólo los había visto tan cerca como yo los vi. Sin embargo, no me gustaría someterme por tanto como media hora lo que tuve que sufrir cuando nos enfrentamos a los Excelentísimos certificados, los alcornoques diplomáticos de los Hohenzollern y los Habsburgo. Y ellos, camaradas, nos miraron como a una dama noble examinando una planta exótica.
"Mira" me dijeron, "a ver qué ha aparecido ahora... Poder soviético. Bueno, hay que darse prisa y examinarlo, para la previsión es que va a estar muerto el jueves de la semana que viene.
Tanto el Barón Kühlmann y el Conde Czernin, por supuesto, personas altamente pulidas: en las conversaciones oficiales se limitan a entender, pero en una conversación privada decian directamente: " Firmaran el tratado de paz, pero otros lo llevará a cabo - los que se "apoderaran" de ti"- las personas querían mejor que ustedes, gobernantes burgueses sólidos: tal vez incluso la monarquía, esos mismos Romanov vuelvan de nuevo. Estaban seguros de eso, y no había duda de ello. Y cuando ese insolente conde Mirbach (pero no debemos hablar mal de los muertos) vino a verme a la Comisaría de Guerra - sin ser invitado, por supuesto (esto ocurrió en mayo del año pasado, cuando los checoslovacos se había levantado en armas en Oriente y los alemanes estaban avanzando en el Sur, el conjunto de Ucrania estaba en sus manos, Skoropadsky todavía estaba en la silla de montar y se creía firmemente asentado), en ese tiempo el maldito conde Mirbach me preguntó, desde la altura de su grandeza: "Bueno, ahora, ¿cuándo vas a decir adiós a Rusia?"
Fuera de mi obligación de ser cortés, traté de evitar dar una respuesta directa y respondí algo como esto: "Ah, bueno, ya sabes, el conde, en nuestros tiempos cambiantes y ansiosos no hay gobiernos estables en cualquier lugar." A lo que él respondió: con toda la insolencia de un Junker prusiano: "No, estoy hablando de su gobierno:" Entonces, olvidándose de cualquier obligación de ser cortés, lancé esto hacia él: "Una cosa es segura, conde, nuestro gobierno es más robusto que algunos gobiernos hereditarios."
Y, camaradas, deberías haber visto la cara del conde Mirbach. Esto tuvo lugar en ese mismo día, cuando el hambre en Moscú, la contrarrevolución estaba tratando de provocar enfrentamientos en las calles durante la procesión de la Cruz: las procesiones religiosas se estaban moviendo más allá del Kremlin, y el conde Mirbach, mirando por la ventana (nuestra conversación tuvo lugar en el tercer piso), repito: "En todas partes, en todas partes, el tembló." Por lo tanto, cuando le dije que nuestro gobierno era más robusto que algunos gobiernos hereditarios, él me miraba como un loco que había olvidado todas las leyes, humanas y divinas.
Mucho tiempo ha pasado desde aquel día - no es todavía un año, para estar seguros, pero ¿que es un año en la historia de las naciones? - Y ¿dónde está el Conde Mirbach, ahora? Es cierto que lo mataron, pero donde ahora está el Kaiser alemán? Está sentado en Holanda, bajo llave en algún lugar, sin atreverse a dar la cara en su propio país. ¿Y el barón Kühlmann y el Conde Czernin, con la que nos sentamos allí en Brest-Litovsk? ¿Y la monarquía alemana? No hay rastro de lo que quedo. ¿El ejército alemán? Ha dejado de ser, se ha caído a pedazos. ¿Y la clase obrera alemana? está luchando por el poder.
La monarquía austro-húngara se ha golpeado, y quebrado. ¿Dónde está el emperador austro-Húngaro Karl? Él está escondido en alguna parte. ¿El Conde Czernin? Él está escondido en alguna parte. Pero el poder soviético existe en Moscú, en Petrogrado y en Samara, y en todas partes, es cien veces más estable de lo que era hace un año.
Estábamos amenazados por las garras del imperialismo anglo-francés, y hubo un momento en que parecía que las garras se nos iban a exprimir hasta la muerte. Después de su victoria sobre Alemania no había límites a la omnipotencia de los británicos y los franceses. Por otra parte, la propia burguesía alemana, junto con Hindenburg, con impaciencia entró al servicio de Francia y Gran Bretaña con el fin de aplastar a los bolcheviques. He aquí algunos periódicos alemanes recientes, en los que dicen claramente en los artículos editoriales: "En Occidente, es decir, en la frontera entre Alemania y Francia, levantan paredes de hormigón y hierro fundido, en forma de fortalezas: se destacan la paredes del antiguo odio nacional entre Francia y Alemania. Pero todo eso no es nada si se compara con el abismo que nos separa del Este. En Francia tenemos que llegar a un acuerdo u otra manera, pero con los bolcheviques, con el poder soviético, nunca. Ese es un orden mundial diferente, los pueblos rechazan - esto también se dice en pocas palabras - "rechazan todos los fundamentos de la vida económica y la propiedad privada", y, añadamos nosotros mismos, "ellos" rechazan ese orden que se basa en el beneficio sagrado. La lucha contra Gran Bretaña y Francia, las antiguas fortalezas de Belfort y Verdun, todo eso no es nada comparado con el odio que nos inspiran en el capital europeo unido. Esto es reconocido por la burguesía alemana, aplastada, humillada y saqueada, la cual, incluso ahora, retorciéndose bajo el talón de la burguesía francesa y británica, dice: "Y sin embargo, está más cerca de mí, tú eres más parecido a mí, que esa terrible república soviético comunista." Así es como se sienten acerca de nosotros, en Alemania, en Francia, en Gran Bretaña, en todas partes. Es cierto que se puede decir que, cuando Gran Bretaña y Francia propusieron así hacer un viaje a las Islas de los Príncipes, el poder soviético estuvo de acuerdo y de acuerdo a la vez, al igual que en Brest-Litovsk, porque estamos dispuestos a hacer uso de la posibilidad para acortar nuestro frente, para ganar un armisticio, una tregua, para aligerar la carga soportada por nuestro Ejército Rojo y por todos los trabajadores. Si hubiéramos ido a las Islas Príncipe, podría, por supuesto, haber sido los que fuimos a Brest-Litovsk, no por simpatía, respeto y confianza en relación a Clemenceau, Lloyd George y el viejo transatlántico hipócrita Wilson - No, camaradas, en cuanto a ello se refiere, Clemenceau, Lloyd-George y Wilson, al igual que los Hohenzollern y los anteriores Habsburgo, no se engañen por un momento, ellos saben lo que nosotros sentimos hacia ellos como ellos sienten hacia nosotros. Estamos unidos a ellos por odio interior, la enemistad mortal interior, y cualquier acuerdo con ellos es dictado sólo por el cálculo frío y consiste simplemente en una tregua temporal, después de lo cual la lucha inevitablemente estallará con nueva fuerza.
Antes, parecía que estaban lejos de estrangularnos, entonces nos invitaron a venir a las Islas de los Príncipes, pero luego se dejó de hablar de eso. ¿Por qué? Debido a Kolchak, Denikin, Krasnov y Mannerheim en Finlandia, decían a la bolsa de valores imperialista: "Danos tiempo, dennos sólo los dos o tres meses de la primavera y el poder soviético será aplastado, y usted no tendrá que negociar con ellos en las Islas de los Príncipes A lo que Lloyd George respondió: "Usted nos prometió hace mucho tiempo". Miliukov fue el primero en prometer, entonces no estaba Kerensky, y Skoropadsky en Ucrania, y Krasnov: ahora Krasnov ha huido de Rostov y ha sido sustituido por Bogayevsky. Todos ustedes hicieron esa promesa. Kolchak dio esa promesa hace mucho tiempo a Estados Unidos. No podemos ayudar más con los soldados, nuestra situación, tanto en el Norte como en el Sur es cada vez peor. Entonces Kolchak, Denikin y los demás respondieron: "Nosotros pedimos, os rogamos que nos dé un poco de tiempo con el fin de acabar con el poder soviético. No empiece a negociar con él, no fortalezcan su posición.
Estamos preparando una gran ofensiva en la primavera."
Y esta ofensiva de primavera ha llegado, ahora estamos experimentando. Durante todo el invierno, los aliados estaban suministrando dinero y proyectiles. Sin suministrar mano de obra, porque tenían miedo de involucrarse profundamente en nuestros asuntos, a empantanarse en nuestra llanura Soviética, porque se dieron cuenta de la experiencia de Alemania que, mientras los soldados de los imperialistas entran en Rusia bajo la bandera tricolor del imperialismo y la tiranía, dejan la Rusia soviética bajo la bandera del comunismo.
Estuvieron de acuerdo en dar armas, dinero, fusiles, piezas de plata, pero están retirando sus soldados.
En Francia, el principal periódico Le Temps, y en Gran Bretaña, el periódico del mismo nombre, The Times, digamos con franqueza que las tropas francesas se están retirando de Odessa, ya que, después de la caída de Nikolayev y Kherson, la posición de la fuerza expedicionaria en Odessa ha llegado a ser muy peligrosa. Así es como escriben sobre ello en la prensa europea. Tengo aquí un telegrama, recibido hoy o ayer, frente a la situación de las tropas aliadas en el norte de Rusia: No sé si ha sido publicado en la prensa. 'América. Transmite por radio mensajes desde París para Canadá. La alarma involuntaria que se ha apoderado de los círculos británicos sobre el grave peligro de aniquilación que amenaza la expedición Arcángel se ha limitado a confirmar la opinión de los líderes militares estadounidenses, expresaron hace muchos meses. Los recientes hechos notables se han agregado desde entonces, en particular, el motín de las tropas finlandesas en Arcángel.
Los estadounidenses y los británicos movilizados, o, mejor dicho, reclutaron los regimientos finlandeses cuando los alemanes ocuparon Finlandia, y los británicos se presentaban como libertadores de Finlandia del imperialismo alemán. Ahora un mensaje Americano transmitido por radio desde París habla abiertamente de un motín de soldados finlandeses que forman parte del ejército anglo-americano en nuestra costa del Norte: "El motín de los soldados finlandeses amenaza con aislar a nuestras tropas de la línea de comunicación solamente, y de la concentración de buques de guerra bolcheviques en el Dvina y el Vaga muestra que están listos para atacar. Los hombres de Canadá constituyen el grueso de las fuerzas en esta área. Las fuentes oficiales afirman que no existe la más mínima esperanza de reforzarlas antes el comienzo del ataque bolchevique.
El Daily Mail de Londres dice en un editorial: "La responsabilidad por el peligro radica en los aliados. Enviaron a este ejército aliado y se negaron a retirarse. Así lo hicieron deliberadamente y por completo caso omiso del peligro que amenaza al ejército, a pesar de las advertencias de los militares y navales. Los ojos del mundo entero se volvió hacia ellos si caen en manos del enemigo, por su suerte será una espantosa", etcétera, etcétera. Eso es una mentira descarada, por supuesto. Si caen en nuestras manos vamos a tratarlos como tratamos a los cientos, y ahora probablemente incluso miles, de franceses, británicos y americanos que hemos tomado prisionero en Ucrania y en el Norte. Los vamos a sentarlos en un banco de la escuela y darles clases, a los comunistas franceses y británicos, y harán un progreso espléndido.
En el Parlamento británico un diputado burgués recientemente pidió al Ministro de la Marina, si bien era cierto que un cierto inglés llamado Price [Price Morgan Phillips trabajó como traductor para el Comisario del pueblo para Relaciones Exteriores. Se fue de Rusia para Alemania en diciembre de 1918 y trabajó como corresponsal del Daily Herald en Berlín. La cuestión parlamentaria mencionada por Trotsky le preguntaron el 20 de febrero de 1919: respuesta del portavoz del Gobierno fue que Price había estado editando un ensayo, El llamado, el cual se distribuyo entre las tropas británicas en la zona Múrmansk, incitando a un motín. El Libro de Price Mis Recuerdos de la Revolución Rusa fue publicado en 1921. Cuando Price asumió como candidato laborista para la Ciudad de Gloucester en 1922, el presidente del Partido Laborista local afirmó: "Él no es un bolchevique y se ha adherido a la Constitución Nacional del Trabajo. Él no fue un traidor: nunca estuvo dentro de mil millas de un soldado británico en Rusia... Mucha gente creía que iba a ser detenido, pero Scotland Yard no tiene ninguna orden de arresto contra él..."] estaba llevando a cabo la agitación bolchevique criminal en la costa de Múrmansk, y si era cierto que un batallón británico no se había amotinado y tuvo que ser retirado. Y el Ministro Naval Británico se vio obligado a confirmar que, efectivamente, este Price, quien anteriormente había sido un corresponsal del Manchester Guardian, un periódico democrático británico, se había, en nuestra escuela soviética, convertido en un comunista y que había sido enviado desde Moscú hacia el Norte, donde emprendio una agitación de gran éxito: también eso más de un batallón se habían amotinado allí, y que estas tropas iban a ser llevados a casa. En Odessa dos camaradas franceses fueron fusilados por el general francés al llevar a cabo la agitación entre las tropas. No en vano ha este general francés se refirió a la excesiva dureza del clima y se apresuró a llevar a sus tropas de vuelta a casa.
Podría citar el diario alemán igual que los anteriores, dice: "El Ejército Rojo es fuerte, pero es fuerte, no tanto en armas como en la propaganda oral. Los bolcheviques, dice el documento, "no son sólo el partido político que en las actualidad gobierna el Estado ruso - nada de eso, ellos son revolucionarios mundiales que están poniendo en práctica el principio del internacionalismo estatal y que rechazan en la práctica las reglas de la vida económica y el concepto de propiedad privada."
Y continúa: "No podemos resistir a las masas imponentes del Ejército Rojo con nuestros destacamentos voluntarios de Hindenburg, y defender nuestra frontera, debido a que el Ejército Rojo tiene a su disposición un poder colosal de propaganda, ya que moviliza a todos los descontentos en todo el mundo bajo la bandera del poder soviético."
Esa es la admisión hecha por el presente ensayo burgués, el Berliner Tageblatt. Toma nota de la consternación miedosa de las clases dominantes de todo el mundo y acaba dirigiéndose elogios genuinos para el gobierno soviético: "La claridad y la inteligencia de la política de Lenin y Trotsky es igualada por la falta de sentido y contradictorio de la política de los países de la Entente. Por su política no están más que empujando a Alemania en los brazos de los bolcheviques", etcétera.
Hay que tener conciencia de que ahora prevalece en la mente de las clases dominantes, la burguesía, ministros, generales, los gobiernos de todos los países. Ellos ven que algún tipo de fuerza elemental poderosa ha penetrado en la conciencia de la clase obrera. En todas partes se dedican a levantar una especie de cordón sanitario que se pretende rodear a la Rusia soviética y para evitar que el bacilo del bolchevismo, los microbios del poder soviético, a causa de hacer su camino hacia el oeste - mientras que al mismo tiempo envían expediciones contra nosotros, con lo que tomando el camino más rápido a la infección. Los principales órganos de prensa registran la existencia de confusión, impotencia, completa postración ideológica y política. He citado a The Times y Le Temps, un documento francés, y también uno publicado en Berlín: todos se quejan de la confusión y estupidez de sus clases dominantes. Se dijo hace mucho tiempo que cuando Júpiter quiere destruir a alguien por primera vez haciéndoles enojar. Eso es comprensible - cuando la posición de una clase se convierte en esperanza, a menudo pierde la cabeza.
No voy a entrar en estas consideraciones. Ese no es el punto. Dondequiera que la historia está trabajando para nosotros, para la clase obrera, insta a la clase obrera al ascenso. Dondequiera que la historia está exponiendo a todo el fundamento de la regla de las viejas clases, inevitablemente sucederá. Han sido condenados por la historia. Señalé esto cuando dije que nuestra posición internacional es cada vez mejor con cada mes, cada semana y cada día que pasa. Estamos cada vez más fuerte, cada vez son más débiles. Por eso no tenemos miedo de una tregua. El tiempo está de nuestro lado. Cuando expire la tregua, seremos más fuertes, será más débil. Si habrá o no habrá una tregua no lo sé, pero ellos están retirando a sus fuerzas, y en el norte estamos avanzando con éxito. Los aullidos de los suyos no son accidentales. Tras la captura de Shenkursk nos concentramos nuevas fuerzas allí, y sólo ayer un telegrama reportó un nuevo salto hacia adelante de 18 verstas hacia Arcángel. No tengo ninguna duda de que esto es sólo el comienzo de una nueva ofensiva que traerá a nuestros miles de escolares comunistas varios buenos comunistas británicos y estadounidenses.
Todo esto pone de manifiesto el hecho de que la situación internacional es favorable. La historia ha dejado a nuestros enemigos internos sus últimas semanas, el último mes o dos meses. Y saben que si ahora, en abril y mayo, junio o en julio, no logran hacernos perder nuestro equilibrio y caer en el mismo umbral del socialismo en Europa, nunca lo conseguirá. Puede suceder que un hombre sano y fuerte pueda caer en un trozo de cascara de naranja y romper su cuello. Eso es lo que esperan - que el poder de trabajadores y campesinos, en estas difíciles circunstancias en que la revolución en Europa está en desarrollo, pero aún no ha logrado la victoria completa, cuando estamos siendo acosados por todas partes, cuando lo hará, tal vez, sea lo suficiente para Kolchak y Denikin romper el frente en un momento dado, para atemorizar, aterrorizar, desmoralizar al ejército rojo, para engañar a los campesinos medios, levantándolos en rebelión contra el poder soviético bajo la consigna del poder soviético, para crear confusión y derramamiento de sangre - que en estas difíciles circunstancias el poder soviético en Rusia se pierda en la víspera de su triunfo completo en todo el mundo.
Este es el significado de la ofensiva de Kolchak. En todos los demás frentes de la ofensiva ha abortado. Los batallones alemanes Hindenburg han tenido cierto éxito en Letonia y en Occidente en general, junto con los polacos y los guardias blancas letonas, estonios y lituanos Bielorrusos-, pero los propios periódicos - Tengo dos de ellos conmigo, uno del Oriente-prusiana y uno de Berlín - dicen francamente: "Estos éxitos son fortuitas y parciales, no podemos explotarlos. Si poseemos alguna unidad firmes en absoluto, los necesitamos ahora en Berlín, contra los Espartaquistas, no contra los bolcheviques rusos.
La posición en el frente occidental está siendo restaurada. Las Bandas de Petlyura se arrastran lejos y se quiebran.
No nos asustan. La revolución soviética ha pasado de Ucrania entrando a Galicia y de Galicia fue a la retaguardia de Petlyura. Esta retaguardia es ahora una conflagración en llamas a su espalda.
No había muchas unidades regulares del Ejército Rojo en Ucrania. Pero incluso antes de esto las poderosas revueltas de trabajadores y campesinos estallaron, un retiro enemigo desmoralizado había empezado la cual participaron no sólo los Guardias Blancos rusos Grishin-Almazov, sino también las unidades regulares anglo- francesas contra el que luchamos ante Berezovka, donde capturaron a un gran reparto de botín de guerra, entre ellos tres tanques formidables.
En el Don y en la cuenca del Donets ninguna ofensiva fue lanzada contra nosotros. Continuamos nuestra marcha victoriosa hacia la zona del Don, que tendrá continuidad en Caucasia. Krasnov ha sido golpeado. Denikin será golpeado. En la cuenca del Donets, donde están concentrando todo lo que poseen, y donde los vamos a agarrar con mano de hierro, desde Mariupol a Taganrog, desde Vorónezh y Velikoknyazheskaya través Torgovaya a Bataisk y Rostov, estamos agarrando los cada vez más firme y fuertemente. El mes del deshielo de la primavera va a pasar, y entonces nuestra ofensiva va a ir hacia adelante, siguiendo su camino natural. Somos el más fuerte allí. No ocultaré el hecho de que nuestra flotilla magnífica se encuentra a la entrada del Mar Caspio, y es incomparablemente más poderosa que la flotilla enemiga.
Queda el Oriente, sólo el este - los Urales, Siberia, donde Kolchak está avanzando y estamos retirándonos, donde nuestro enemigo está disfrutando del éxito mientras que recientemente hemos sufrido reveses. Aquí Kolchak se impuso la tarea de interrumpir el Volga a toda costa antes de la llegada de la primavera, para privarnos de esta arteria muy importante. No hace mucho tiempo que alcanzaba los Guardias Blancos fuera del Volga y realizó un río honesto soviético de la misma. Ahora los guardias blancos quieren una vez más a la deshonra y contaminan el Volga y llevarla lejos de los trabajadores y los campesinos que lo necesitan para el transporte. Si hay un peligro que amenaza al poder soviético, el poder de los obreros y campesinos, se trata de las bandas de Kolchak, que fueron reunidas teniendo el apoyo de los eseristas y mencheviques para la idea de la Asamblea Constituyente. Kolchak tiene una retaguardia considerable. Están los campesinos kulaks ricos en Siberia, y Kolchak depende de ellos. Los peores elementos contrarrevolucionarios del viejo cuerpo de oficiales han acelerado desde todas partes del país para unirse a Kolchak. Con su ayuda y la de los kulaks Kolchak está llevando a cabo una movilización muy amplia de las masas campesinas. Ha recibido los suministros necesarios de América, que tiene en la actualidad una amplia zona de los Urales, que ha vuelto a tomar de nosotros Ufa, que fue ganado con la sangre de los obreros y campesinos, y está amenazando las cercanías de Kazán y Samara. Aquí, camaradas, nos enfrentamos a la tarea de la mayor importancia para los trabajadores y campesinos de todo el país en el momento actual: debemos a toda costa concentrar nuestras mejores fuerzas en el frente del Este. El éxito Kolchak se debe en gran medida al hecho de que nos vimos obligados el otoño pasado y en los primeros meses del invierno, después de haber logrado grandes éxitos en el Este, para eliminar algunas unidades fuertes desde el frente del Este, junto con nuestro mejor trabajadores, y transferirlos al sur, contra Krasnov, que estaba amenazando, a través de Vorónezh, en el corazón de la Rusia soviética, Moscú.
El trabajo ha sido realizado tres cuartas partes en el Sur. El último cuarto se completará con las fuerzas que están allí ya. Ahora, todas nuestras reservas, todas las fuerzas que tenemos en la forma de unidades militares, y todas las fuerzas de organización e ideológicos, debe dirigirse al frente oriental. La consigna para la Rusia Soviética en el momento actual es la siguiente: A los Urales. Debemos concentrar todas nuestras fuerzas en esa dirección, debemos crear regimientos de choque a través de un esfuerzo por parte de los obreros y campesinos, y avanzar en ellos desde el Volga hacia el este, hacia los Urales.
Los Urales debe ser nuestro, así como la zona del Volga ya es nuestra y también, en una medida considerable, la zona del Don. Los Urales debe ser nuestra. Hay que recuperar Zlatoust, Yekaterimburgo, Perm, debemos cortar un camino para nosotros a través de Chelíabinsk en Siberia, donde los trabajadores y los campesinos pobres nos esperan como sus libertadores.
Si bien esta es la principal tarea de la tierra soviética entera, aquí en Oriente es doblemente y triplemente su tarea principal, camaradas Samara. Aquí antes había un nido de gran alcance de las Guardias Blancas, pero ahora es un centro de nuestro Ejército Rojo. Aquí se entrelazan las rutas de los tres ejércitos del frente oriental. Toda la atención, por lo tanto, todos los esfuerzos deben concentrarse en el cumplimiento de las tareas y la satisfacción de las necesidades del frente oriental. Ustedes son la retaguardia inmediata, la zona contigua al frente. Ustedes deben contraer, a sus instituciones civiles soviéticos y ampliar los militares misma. Todo el que puede ser útil en el frente tiene que ir hacia el frente - como comisarios, en los órganos de suministro, en las células, los regimientos, el cuartel. Ustedes deben dar a sus mejores trabajadores al frente. El destino de la Unión Soviética está siendo decidido en el frente oriental, y con ella la suerte de la revolución mundial en su conjunto. La revolución mundial, por supuesto, no está muerta, que seguirá avanzando, pero puede ser echada atrás por un año, o dos años, o diez años. Queremos entrar en esa revolución mundial, basándonos en la Rusia soviética, tal como existe hoy en día - en lo que preparó a través de décadas de trabajo tenaz lucha revolucionaria y, lo que hemos conquistado en los días de octubre y se han defendido contra todos los enemigos. Esta Rusia soviética, renovada por la sangre de los trabajadores, por sus terribles experiencias, no quiere renunciar a nada. Con nuestros pechos vamos a formar un escudo a su alrededor, y ninguna fuerza romperá el escudo.
Camaradas, espero que tendré el derecho de decirles en el frente que en los 5°,4°, 1°ejércitos y en el grupo Sur, en Samara, poseen una retaguardia firme, templada.
Compañeros de Samara, cuando estaban en problemas, cuando Dutov estaba haciendo discursos aquí, tal vez en esta misma sala, dimos en Moscú y Petrogrado la voz de alarma. Les dijimos a los obreros de Petrogrado y Moscú que un nudo se había tirado apretando en el Volga la cual había que cortar… y los obreros hambrientos, exhaustos de Petrogrado, no se quejan de sus raciones pobres, trajeron en el cinturón aún con más fuerza, tomaron rifles, y partieron para liberar el Volga y el Samara.
Hoy en día, camaradas, Samara esta libre, y en Samara existe una fuerte guarnición, una poderosa organización de los soviets, los sindicatos y los comités de fábrica, la nata de la clase obrera de Samara, unidos por una idea común y acerado por duras pruebas y todas las luchas previas. Y ahora ustedes no responden a los trabajadores de Moscú y Petrogrado por liberarlos, porque no van a rendirse y así no será necesitara liberar.
En este encuentro, unidos por una sola idea y una sola voluntad, declaramos que todos los intentos de Kolchak para separar el Volga son tantos esfuerzos de impotencia apasionados. El Soviet de Samara, la guarnición de Samara, el proletariado de Samara, junto con nuestro frente y con la retaguardia profunda, prometa y jure que Samara no se rendirá, y que el Volga quedará un río Soviético honesto.●
[Teniendo exitosamente irrecuperable varios submarinos alemanes,
Kolchak fue en 1917 enviado por el Gobierno provisional de Rusia a los EE.UU,
para asesorar a los americanos en la guerra antisubmarina, En su camino de
regreso, se enteró de la Revolución de Octubre y, al darse
cuenta de que Rusia ahora dejaría la guerra, él ofreció
sus servicios a la embajada británica en Tokio. Lo aceptaron, y se
dirigió para la Mesopotamia, donde una expedición al Mar
Caspio, contra de los turcos, se estaba preparando. Sin embargo, cuando
llegó a Singapur Kolchak, fue convocado por el embajador ruso anti-
bolchevique en Pekín para ir a Manchuria (donde él había
servido en la guerra ruso-japonesa) con el fin de "velar por los intereses
rusos allí."]