Leon Trotsky

Orden Por el Presidente del Consejo de Guerra Revolucionario de la República y la estación de Comisario del Pueblo para Asuntos Militares y Navales, el 6 de junio de 1919, No.106, Balakleya.

 


Escrito: 6 de junio de 1919
Fuente digital de esta edicion: en el Mia.org
Traduccion: Rodrigo Cisterna, febrero de 2015.
HTML: Rodrigo Cisterna, 2015.


 

[Balakleya está en la línea ferrea entre la ciudad de Jarkov e Izyuxn, A mitad de camino.]

Tomando ventaja de la retirada temporal por nuestras unidades, los sinvergüenzas, los provocadores y agentes de Denikin han levantado la cabeza y se está trabajando a toda máquina. Ellos están circulando rumores siniestros, sembrando el pánico, llevando consigo la agitación contra el poder soviético y los comandantes designados por él, e incitando a los soldados a desobedecer las órdenes y desertar sus puestos de combates.

La situación en el frente exige el máximo esfuerzo, el orden, la disciplina y el estricto cumplimiento del deber. Los intereses de los trabajadores y campesinos de Ucrania y de toda República Federativa Sovietica demandan que las medidas despiadadas sean tomadas para hacer frente a los traidores quienes están socavando el vigor del Ejército Rojo.

Anuncio que, con este fin, un Tribunal Revolucionario Militar Extraordinario se ha creado, con la presidencia de un miembro del Consejo ucraniano de Comisarios del Pueblo, el camarada Pyatakov.

Este tribunal se le ha dado poderes extraordinarios para castigar a todos los enemigos de la tierra soviética y del ejército soviético, sin importar el cargo que ocupan y el trabajo que están haciendo.

El presidente del Uyezd, volost y el comité ejecutivo de la aldea, los comisarios militares de Uyezd y volost y los comandantes y los comisarios de las estaciones de tren están ordenados a observar atentamente y con cuidado todas las personas quienes pasan por los lugares por los que son responsables y arrestan inmediatamente a cualquiera que detecte en una agitación deshonrosa.

Los comandantes y los comisarios de los regimientos y los comandantes de los trenes militares deben mantener estrecha vigilancia sobre los sinvergüenzas quienes se meten entre los hombres del Ejército Rojo y circulan rumores en base sobre las traiciones de los comandantes, para así fomentar egoístas e incitar a los cobardes a huir. Señores del honorable Ejército Rojo camaradas deben dar la cooperación necesaria a las autoridades soviéticas en este sentido.

Los hijos de los Kulaks, gritan y chillan, Grigoriyevistas y Makhenovistas quienes se han infiltrado en su camino en el Ejército Rojo deben ser despiadadamente aplastados.

Emito el presente aviso, para que sin misericordia sea demostrado a los enemigos del pueblo y a los que conspiraban por su actividad. El poder de los obreros y campesinos será cauterizado con un hierro al rojo vivo la úlcera de provocación, del Grigoriyevismo y Makhenovismo.

¡Muerte a los egoístas y a los sinvergüenzas!

¡Vivan los guerreros honorables del Ejército Rojo de los obreros y campesinos! ●