V.I. Lenin

122
A SU MADRE, M. A. ULIÁNOVA

 



Escrito:  9 de febrero de 1901. Enviada desde Munich.
Publicado por primera vez: En 1929 en la revista Proletárskaia Revoliutsia, núm. 4.
Fuente del texto: Editorial Akal, Obras Completas, Tomo 41.
Preparado para el MIA: Rodrigo Cisterna, junio de 2016


 

 

Moscú. María Alexándrovna Uliánova. Calle Bajmétievskaia, casa de Sharónov. Russland. Moskau

9/II.1901.

Querida mamita: ¿Cómo estás? ¿Qué hay de nuevo allí, qué les escribe Mitia desde lúriev? Es de suponer que en vísperas de exámenes trabajará más que nunca.

Recientemente recibí los viejos manuscritos [1] de Maniasha, y los regalos de Viena [2]. Muchas gracias por todo.

Aquí parece que hubiera vuelto el invierno, es decir, ha caído algo de nieve. Pero no hace frío y la nieve se derrite durante el día.

Fui a la ópera hace algunos días, donde escuché con verdadero agrado La Zhidovka [3] . La había oído ya una vez en Kazan (cuando cantaba Zakrzhevski), hará unos 13 años, y muchos pasajes me quedaron en la memoria. La música y el canto fueron buenos. Fui también varias veces al teatro (alemán), y algunas veces entendí algo, la idea general, de cualquier modo. ¿Van ustedes al teatro en Moscú?

Hace poco me escribió Aniuta que el trabajo la retendría todavía algún tiempo.

¿Has pensado, querida mamita, en solicitar autorización para que Nadia vaya a verte sólo por unos pocos días? Probablemente le gustará mucho, pero las capitales generalmente están prohibidas, después de Ufa [4], escribe ella, son los únicos lugares prohibidos.

Me gustaría que Maniasha me escribiera dos líneas cuando me suscriba a alguna revista, a fin de saber cuándo debo ir a pedirlas al correo.

Te abrazo fuertemente, querida mía, y envío saludos para todos los nuestros.

Tuyo, V. U.

* * *

[1] No se ha podido establecer a qué manuscritos se refiere. (Ed.)

[2] Véase el presente tomo, carta 120. (Ed.)

[3]La Zhidocka: Femenino de zhid, denominación despectiva que los antisemitas daban a los judíos en la Rusia prerrevolucionaria. (Ed.)

[4] Al viajar de Ufa a Alemania, N. K. Krúpskaia se quedó unos días en Moscú. (Ed.)