Leon Trotsky

NUESTRAS TAREAS.

NUESTRA TAREA

 


Escrito: 21 de Marzo de 1918

Fuente digital de esta edicion: en el Mia.org

Traduccion: Matteo David, diciembre 2017.

html: Marxists Internet Archive, Diciembre 2017


 

Frente a las calamidades y peligros sin precedentes que amenazan a la República Soviética, solo hay un camino a la salvación: es el camino del trabajo ininterrumpido y la disciplina revolucionaria.

Debemos acrecentar la fortaleza económica de nuestro empobrecido país.

Debemos asegurar la defensa armada de la República Soviética contra las bestias del imperialismo.

En estos días terribles, todo ciudadano honesto tiene el deber de ser un trabajador y un soldado.

Los próximos días verán la introducción de una ley sobre el reclutamiento militar universal compulsivo. [8]

La República impone a los instructores experimentados el deber de representar a todos los ciudadanos, tanto en la ciudad como en el campo, capaz de responder al primer llamamiento para ir, armas en mano, a la defensa de la patria.

La instrucción militar se llevará a cabo fuera del horario ordinario de trabajo. Nadie se atreverá a pedir ningún tipo de recompensa por las horas que dedica a su supremo deber cívico, es decir, estudiando cómo defender la República Soviética. Para que, en un momento de emergencia, todos los ciudadanos armados puedan ir a la defensa del país, necesitamos crear cuadros firmes y confiables. Esta es la tarea urgente de los meses y semanas que tenemos por delante. La República Soviética, rodeada de enemigos, está procediendo sin demora a organizar batallones de los luchadores más acérrimos y más abnegados. Su sustento y el de sus familias serán atendidos con los recursos comunes del pueblo. Los cuadros soviéticos deben soldarse juntos con una disciplina de hierro, entrenados, equipado y armado de acuerdo con los últimos requisitos del arte de la guerra.

Así como la industria necesita ingenieros y la agricultura necesita agrónomos científicos, la tarea de defensa también requiere de especialistas militares. La República Soviética convoca urgentemente a los especialistas militares a trabajar. La grave situación de Rusia, que las bestias de presa del mundo quieren crucificar en la cruz del imperialismo, incita a todos los honestos militares y especialistas navales a darse cuenta de que no se atrevan a mantenerse al margen. El poder soviético les da plena oportunidad de dedicar todas sus potestades, conocimientos y talentos a la causa de la organización de la defensa del país. Los especialistas deben convertirse en instructores, maestros militares, líderes técnicos del Ejército. En la esfera específicamente militar, se les debe dar la palabra decisiva, y sobre ellos se debe colocar toda la carga de la responsabilidad.

En el ámbito de la formación, la soldadura ideológica y la educación política del ejército popular, la palabra decisiva pertenecerá a los soviets, en el centro y en las localidades. Este trabajo se llevará a cabo de acuerdo con un plan común, elaborado con la participación de los mejores expertos militares y bajo la constante supervisión técnico-militar de los inspectores especializados.

La República Soviética necesita un ejército que sea capaz de luchar y conquistar.

Es responsabilidad del poder soviético asegurarse de que ninguna de las instituciones o unidades separadas del ejército popular se transformen en focos de contrarrevolución, en instrumentos dirigidos contra los trabajadores y campesinos. El control político sobre toda la organización y la vida del ejército se confiará a los comisarios militares. El puesto de comisario militar es uno de los más responsables y más honorables de la República Soviética. El comisario salvaguardará el vínculo interno más cercano entre el Ejército y el régimen soviético en su conjunto. El comisario encarnará el principio del deber revolucionario y la disciplina indestructible. El comisario se asegurará, con toda la fuerza de su autoridad y potestad, cumplimiento inmediato e incuestionable de las instrucciones operativas y de combate emitidas por los líderes militares. Estos son los principios que el Gobierno establece como base para la creación del Ejército: reclutamiento militar universal y compulsivo en escuelas, fábricas y pueblos; formación inmediata de cuadros firmes de los luchadores más abnegados; traer comisarios militares como guardianes de los más altos intereses de la revolución y del socialismo.

En nombre de la República Socialista, el Consejo de Comisarios del Pueblo convoca a todos los soviéticos, trabajadores conscientes y campesinos, todos ciudadanos honestos que se dedican a la causa del pueblo, redoblen sus esfuerzos en la gran obra de salvaguardar la independencia y la libertad de nuestro país.

La Rusia libre no será esclavizada. Se levantará y se fortalecerá, expulsará a las bestias de presa, vivirá en unidad fraternal con los pueblos liberados de todos los países.

Lo que se necesita es que, en estos oscuros días de calamidades que afectan a todo el pueblo, todos los verdaderos hijos de la Rusia Revolucionaria no tengan pensamiento, ni deseo, ni compromiso más que la salvación de nuestra tierra ensangrentada.

¡Que no haya vacilación, sin dudas! Trabajo, orden, perseverancia, disciplina, sacrificio propio, ¡y triunfaremos!

L.T. 21 de marzo de 1918.-

8. El decreto sobre reclutamiento militar universal compulsivo. Fue adoptado por el Comité Ejecutivo Central de toda Rusia de los Soviets sobre la base del informe del camarada Trotsky del 22 de abril de 1918. ?