Escrito: 24 de noviembre de 1918
Fuente de esta edicion: MIA.org
Traduccion: Rodrigo C, 10 de nov de 2014.
Html: Rodrigo Cisterna, 2014
Por el Presidente del Consejo de Guerra Revolucionario de la República y del Comisario del Pueblo para los Asuntos Militares y Navales a las tropas en el Frente Sur, 24 de noviembre de 1918, N ° 64
Nuestras fuerzas en el frente Norteño del Cáucaso han ganado grandes victorias, limpiando las zonas extensas de las bandas de la Guardia Blanca y penetrando en la retaguardia de Krasnov[1].
Hay rupturas y colapso de los soldados de Krasnov y Denikin. Los mal vestidos y mal armados, movilizados por la fuerza los cosacos y los campesinos están, en gran número, dispuestos a rendirse a las fuerzas rojas, pero se ven frenados por el miedo a que se les fusile.
Mando a todos los comandantes, a los líderes de las unidades y a los comisarios de prestar estricta atención a asegurar que todos los campesinos y a los obreros cosacos, movilizados por Krasnov, que vienen a nuestro lado a no estar sujetos a las sanciones. Cada cosaco o campesino que cambia de opinión y baja las armas deben ser recibidas no como un enemigo sino como un amigo. Prohíbo, so pena de castigos más estrictos, los fusilamientos de las filas de cosacos y soldados enemigos. El tiempo viene pronto, cuando los cosacos trabajadores, después de ajustar cuentas con sus oficiales contrarrevolucionarios, se unirán con el conjunto de la Rusia laboriosa bajo la bandera del poder soviético.●
[1] La referencia es a la heroica lucha del 11º Ejército del Frente Norteño del Cáucaso que, aislada del centro, atrajo sobre sí la totalidad de los voluntarios del ejército de Denikin, que impida conceder ninguna ayuda para Krasnov. A finales de octubre, el Ejército Tamam [Serafimovich la novela de El diluvio de hierro que describe las experiencias del Ejército de Taman en esta campaña.] tomo Stávropol y directamente amenazo la retaguardia de Krasnov. Una epidemia de tifus (40.000 soldados estaban enfermos al mismo tiempo), el agotamiento extremo de los hombres del Ejército Rojo, la escasez de suministros, y el aislamiento completo del centro llevó a este ejército casi al borde del colapso. Después de su retirada de Astrakán, los restos del 11º Ejército constituyo a los cuadros de la famosa 33º de Kuban, 7ºº de Caballería y las 34º divisiones de Rifle, que luchó en los frentes de la guerra civil hasta el final.