Escrito: El 30 de abril de 1919, Moscú, En el camino, No.39
Fuente digital de esta edicion: en el Mia.org
Traduccion: Rodrigo Cisterna, febrero de 2015.
HTML: Rodrigo Cisterna,
2015.
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La situación en el frente oriental sigue siendo alarmante. Los refuerzos estan siendo demasiado lentos en aparecer. El esfuerzo necesario no es observable en el ritmo de trabajo de las instituciones soviéticas. Esto se debe en gran medida al hecho de que durante un año y medio del poder soviético hemos crecido demasiado familiarizados con los peligros y con el dominio de la victoria de estos peligros. Muchos compañeros piensan: "¿¡Cómo podría conquistar posiblemente Kolchak la República Soviética!?" - y con ese pensamiento descansan contentos. Este estado de ánimo nos amenaza con los más grandes peligros. En cualquier caso tiene el efecto de ralentizar muy seriamente la movilización de las fuerzas necesarias, y poniendo fuera de la hora de nuestra victoria. Sin embargo, necesitamos una victoria rápida. No tenemos derecho a perder el tiempo. El país es azotado por la hambruna. El país necesita de cereales, carbón, petróleo y algodón. Todo esto se puede suministrar a los obreros y campesinos sólo por medio de una victoria rápida y decisiva. Y esta victoria es, posiblemente, sólo se da un esfuerzo verdaderamente revolucionario por parte de todas las fuerzas avanzadas de la clase obrera y el campesinado consciente.
Se está trabajando muy lentamente. Muchas de las decisiones y medidas que podrían haber sido tomadas en la actualidad se están dejando para mañana. Mucho tiempo se pierde en la transmisión de órdenes de una institución a otra. Los trabajadores responsables en las localidades de ninguna manera de forma continua verifican el cumplimiento de las decisiones. Muchos de ellos se dejan arrullar con palabras.
Los intereses locales todavía suelen ejercer una influencia demasiado grande sobre el trabajo para apoyar el frente oriental. Demasiado mayor número de ejecutivos salen por ser "indispensables" para el trabajo local. Los que se asignan al frente no se eliminan de las localidades lo suficientemente pronto. La transferencia de responsabilidades lleva demasiado tiempo. El material móvil para el movimiento de refuerzos no se ordena a tiempo. La disparidad y la discrepancia se encuentran en todas partes. En un lugar una hora se ha perdido, en comunicación con otro lugar se ha perdido media hora, en ese lugar, a su vez, días enteros se han perdido... Y el resultado es que los refuerzos alcanzan el frente toda una semana más tarde de lo que hubiera sido posible. El tiempo es de mayor importancia decisiva en la guerra que en cualquier otra esfera.
¡Camaradas miembros de la provincia y el comité ejecutivo de Uyezd y los comités del Partido! Dependen de ustedes para darle una barrida de nuevo a todo este trabajo. Ninguna cantidad pequeña de rutina, burocracia, el nuevo Oblomovismo Soviético [Oblomov, el protagonista de la novela de Goncharov (1858) lleva su nombre, es una encarnación de la pereza satisfecha. Como el crítico Marc Slonim escribe: "Él cree firmemente que la inactividad es un símbolo de la superioridad social, y que el trabajo es una maldición." Él se pone en contraste con su amigo Stolz, un alemán laborioso y metódico.] Ha acumulado ya en nuestro mecanismo soviético. El trabajo de servicio al frente del Este no debe ser paralizado por esos fallos. El Comité Central exige que las organizaciones locales ahora dedicar tres cuartas partes de sus fuerzas para trabajar para la culminación de las movilizaciones sucesivas formaciones de tropas y el envío de refuerzos al frente oriental. Esta decisión del Comité Central del Partido debe ser tomada literalmente. Por lo tanto, de cada cuatro trabajadores locales del Partido, tres deben ser transferidos a trabajos de guerra en el sentido amplio de la palabra. Una vez más os repito: todas las provincias, cada Uyezd debe actuar como si la amenaza de Kolchak fuera directamente en su propia frontera y podría ser resguardado fuera sólo por sus fuerzas.
Es necesario acelerar el envío al frente de los compañeros movilizados por el partido y los sindicatos.
Toda la energía se debe demostrar en despachar 10-20 personas en cada subdistritos, de acuerdo con la decisión del Comité Ejecutivo Central de toda Rusia y el Consejo de Defensa el 25 de abril de este año.
Se deben tomar medidas al mismo tiempo, para acelerar la formación sistemática y reenvío de sustituciones planificadas.
La clase obrera rusa se enfrenta a la dura prueba anterior. Este ensayo se mantendrá, y la victoria se ganará -, pero con una condición, que no nos calmamos con optimismo, sin depender de los demás, no ponemos nuestra confianza en el "tal vez", ¡no pierdas un solo momento de tiempo!
Que cada poder ejecutivo del soviéts, todos los miembros del Partido cuelguen encima de su escritorio o en su torno esta inscripción: ¡Recuerde el frente del Este! ¡No pierdas el tiempo!
El 30 de abril de 1919, Moscú, En el camino, No.39 ●